La causa de las tensiones entre ambos países es la región de Nagorno-Karabaj, que se encuentra ubicada en Azerbaiyán pero cuenta con población mayoritariamente armenia
Este martes, el conflicto entre Armenia y Azerbaiyán volvió a recrudecerse.
El ministerio de defensa armenio informó de que el 13 de septiembre a las 00:05 horas, unidades de las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán abrieron fuego intensivo con artillería y armas de gran calibre contra posiciones armenias en dirección a las localidades de Goris, Sotk y Dzhermuk.
Los recientes enfrentamientos se han saldado, por el momento, con 155 muertos, según ha precisado un alto funcionario armenio. La mayoría de ellos pertenecen a las tropas de Armenia.
No obstante, en la madrugada de este jueves se ha confirmado que ambos países han acordado un alto el fuego.
El secretario en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para Armenia, Armen Grigoryan, ha resaltado que el cese temporal de las hostilidades se ha producido “gracias a la implicación de la comunidad internacional”.
La clave: la región de Nagorno-Karabaj
El motivo del conflicto entre Armenia y Azerbaiyán reside en la región de Nagorno-Karabaj, también conocida como Alto Karabaj.
La misma está ubicada en el este de Azerbaiyán (cerca de la frontera entre ambos países) pero su población es mayoritariamente armenia.Los problemas se remontan a la década de 1920.
En ese momento, tal y como señala a Newtral el investigador de la Universidad de Birmingham especializado en política euroasiática, Kevork Oskanian, “el territorio fue asignado a Azerbaiyán por los bolcheviques rusos”.
Cabe recordar que tanto Armenia como Azerbaiyán formaron parte de la Unión Soviética (URSS) hasta su disolución en 1991.Tras el final de la URSS, los habitantes de Nagorno-Karabaj celebraron un referéndum de independencia en diciembre de 1991.
El resultado fue claro: el 82% de la población votó a favor.
Sin embargo, “Azerbaiyán se negó a reconocer el resultado y comenzó la guerra”, detalla Armine Ishkanian, investigadora en el Instituto de Desigualdades Internacionales (dependiente de la London School of Economics).
Desde esa votación, “Azerbaiyán ha reclamado Nagorno-Karabaj apelando a la integridad territorial, mientras que los armenios han reclamado su derecho a la autodeterminación”, indica la experta.
La ONU no reconoce la independencia
A lo largo del tiempo, las luchas militares entre los dos países para hacerse con la región se han repetido de forma constante.
La última (sin tener en cuenta la actual) tuvo lugar en el año 2020, cuando Azerbaiyán se impuso a Armenia y se firmó un alto el fuego que recogió que las fuerzas armenias de Nagorno-Karabaj únicamente podían controlar parte de esta zona.
La posición de la ONU respecto al conflicto es que la autoproclamada República de Nagorno-Karabaj ocupa ilegalmente casi un 15% del territorio de Azerbaiyán.
En las últimas horas, el primer ministro de Armenia, Nikol Pashinián, ha salido al paso de los rumores sobre su predisposición para firmar un documento que reconociera la región de Nagorno-Karabaj como parte del territorio de Azerbaiyán.
“Queridos compatriotas, les exhorto a no dejarse manipular”, ha expresado el jefe de Gobierno armenio en una publicación en sus redes sociales en la que ha aclarado que “ningún documento se ha firmado, ni va a ser firmado”.